Despacito, canción
estrella a nivel Planeta, en español en los Grammy Awards y no se llevó los
altos premios:
Despacito,
la canción que vendió mas de 7 millones de ‘tracks’, la canción que alcanzo 16
semanas corridas en la lista del Hot 100, vista al menos unos 4 billones de
veces por Youtube, RIAA Diamond Certification de ventas (más de 10 millones), vista
por millones de personas en más de 50 países, traducida a cuchucientos idiomas, y
re-producida por sus fanáticos, interpretada con cuanto instrumento musical había
en otros países, pues, aunque parezca increíble, NO se llevó los máximos galardones.
Bah!
Nada de
esto me sorprende, en un mundo donde todos quieren hacer lo que les da la gana,
todos nos creemos expertos de todo, sin mirar lo bueno que están haciendo los demás,
a no ser que sea para criticarlos y destruirlos.
Cada vez
que veo que alguna institución prefiere ignorar el trabajo y el talento de los
artistas, en este caso, pero de cualquier persona, para llegar a el tope, y le
dan los premios a los que a ellos les parece debieran aparecer en los libros de
‘records’, solo me deja saber una cosa, quienes son ellos, los “jueces”. Aun así,
seguimos auspiciando todas estas cosas.
Tenemos que
ponerle fin a esta pendejada de “casi ganadores”, “pa’ que no se sientan mal”, “ay
bendito”. Mira; si tienen una agencia que mide el talento mundial, háganlo bien,
sin miedo, qué tiene de malo que los boricuas aparezcan como los ganadores, como
triunfadores, como grandes creadores; oh, si es muy malo, ya que la prensa
estadounidense y hasta la nuestra solo quieren destacar todo lo corrupto (a
pesar de que no hacen 3K para resolverlo). Oh, es que luego los estadounidenses
se enojan y no le dan la estadidad. Buah ha ha, no puede faltar ese aspecto político,
verdad.
Nos la
pasamos compitiendo los unos con los otros, cuando insisto, debiera de ser
contigo mismo, la prioridad de la competencia de vida. Pues entonces, seamos
leales al juego, están los mejores y los que no dan a la talla, estamos los
triunfadores y están los perdedores, sin hipocresías, sin más ‘frosting’, las
cosas tal y como deben de ser, para parar toda esta confusión humana, y luego
se quejan de porque las generaciones detrás de nosotros, son tan pendejas,
colectivamente hablando.
Mientras
tanto, nadie me puede quitar el orgullo de haber nacido en este pedazo de
tierra de donde salen los más grandes exponentes, no solo de música, pero de
todo lo que nos proponemos y logramos.
Así, que
sigamos hacia adelante, DESPACITO o rapidito, pero para atrás, ni para coger
impulso brindándole glorias a la isla de Puerto Rico. Algún día, no solo sus residentes,
pero el mundo entero sabrá, que no necesitamos de más nadie, más que de
nosotros mismos para tener lo que nos merecemos, honor, gloria y calidad de
vida.
SIGUE
GIRANDO PLANETA
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